9 de marzo de 2011

#5.

El estar en cuarto medio al parecer -y espero no estar equivocado- significa que todos los días llega por lo menos una sorpresa; ¡y está comprobado! es solo cosa de ponerse a leer las entradas anteriores y notar que todos los días llego con algo nuevo que contar. Hoy la sorpresa era amorosa y llena de ternura e inocencia, y no, no estoy hablando de los teletubbies; más bien me refiero a los pequeñitos de kinder y pre-kinder que fueron de visita a la sala mientras estábamos en hora de inglés. Al parecer la tía Carmen se quiso subir al tren de la nostalgia con nosotros, y se puso a recordar cómo eran algunos de los que están en el colegio desde el primer curso de todos. Paseó una cuncuna de niños de no más de un metro veinte, por toda la sala; les contó que eramos los más grandes de la escuela, porque el próximo año no volveríamos a estudiar ahí ya que buscaremos otro tipo de educación; para así presentar a la tía Fabiola que solo dijo "good afternoon children", dejando a todos los petisitos más colgados y preguntándose qué demonios había dicho esa señora.
Aún así, salió una chiquilla avivada que entendió que hablaba en inglés, y gritó con todas sus fuerzas el idioma en el que hablaba nuestra profe.
Fue chocante ver al cabro chico al lado mío, ponerse para que el de atrás lo punteara con todas las fuerzas. Yo sé que ellos no entienden, pero ese comportamiento, y ese poco respeto por el espacio personal que guardaban los dos pendejos, a mí ni se me ocurría a los cinco años.
El horario sigue hecho una mierda, pero al menos lograron confirmarnos que tendremos química después de todo, y no es como que me vaya mal, pero solo no me gusta, y prefiero aprender de células que la tabla periódica que nunca en mi vida me ha salido bien.

Fotos del día:

Frase del día:
"Están al sol de la luna"
Yeminis Ilabaca

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