Esos pequeños incentivos (ya sea una buena nota, una anotación positiva o un punto base) son los que te animan a querer estudiar, para, en mi caso, con mi punto base, después no ocuparlo...
Empezar con matemática me despierta, porque me acosté pasadas las una de la mañana, y desperté con un rostro que te encargo. El punto es que el estar con el cerebro prendido, me ayuda para el resto del día. Igual no entiendo ni una mierda de lo que estoy haciendo es matemática, me se las fórmulas, pero es como que te digan que expliques un problemas y te digan tu propia opinión al respecto, no estoy pensando, solo estoy copiando fórmulas frías y vacías.
En educación física, yo preparado para otro ensayo de Naveta y al final no hicimos nada más que escuchar los tartamudeos del profe al explicar el trabajo más latero del año, la planificación de ejercicios por todo un mes. El año pasado esa huevá me estresó a mil, y quedé más feliz que la chucha al ver que tenía el siete. Este año voy por el siete también.
En historia, la profe Nany nos da la típica guía trucha para rellenar las horas que le quedan antes de la prueba, que sirven para estudiar y te dan un punto base si lo alcanzas a terminar -ahora que lo pienso, no es tan trucha la hueá-, en fin, el punto es que alcancé a terminarlo a la hora que pidió la profe -en consejo, como tres horas después de la hora de historia- y obtuve mi punto base -FeellikeaNerd B-)-.
En lenguaje, el temita del bullying me tenía re-chato, al menos me dio el tiempo para terminar lo de historia y opinar un poco al respecto, porque osea, obvio que tengo que hablar, no me gusta quedarme callado con temas que ya conozco :3. Después vimos una diapo del ensayo, la estructura y mierdas parecidas, no anoté ni una hueá porque tenía paja :D.
En consejo, lo mismo de siempre, hueones que deben plata, candidatura, plata pa' acá, plata pa' allá, los gritos de la tía Nany, y por supuesto, el Bendito Polerón.
Sin frases o fotos. Mañana prueba de Historia y Biología :B
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